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Juego de rol : El Tercer Vasallaje de los 25

Odamarasengan5053Hace 11 años32
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EDITADO EL 18-06-2012 / 00:30 (EDITADO 1 VEZ)
Joancarl5292Hace 11 años33
@Fanjoseka me encanta como escribes 

Javik

Hdhdhdjdhdhd
1 VOTO
3DPrinco518Hace 11 años34
FdR: No se si sera mi movil o algo, pero veo que @Joancarl ha repetido un mensaje anterior, y @Odamarasengan ha repetido dos. No es por reprocharle nada a nadie eh? Solo quiero saber si mi internet es una mieerda  por favor, si podéis mirarlo me contestais 
Joancarl5292Hace 11 años35
@3DPrinco
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FdR: No se si sera mi movil o algo, pero veo que @Joancarl ha repetido un mensaje anterior, y @Odamarasengan ha repetido dos. No es por reprocharle nada a nadie eh? Solo quiero saber si mi internet es una mieerda por favor, si podéis mirarlo me contestais
si y lovpeor de todo es k mi mensaje se puso solo puto mobil de mierda
Odamarasengan5053Hace 11 años36
@Joancarl
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@3DPrinco
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FdR: No se si sera mi movil o algo, pero veo que @Joancarl ha repetido un mensaje anterior, y @Odamarasengan ha repetido dos. No es por reprocharle nada a nadie eh? Solo quiero saber si mi internet es una mieerda por favor, si podéis mirarlo me contestais
si y lovpeor de todo es k mi mensaje se puso solo puto mobil de mierda
Yo tambn lo hice desde el movil
Joancarl5292Hace 11 años37
Dante

Kal y tu fuisteis hacia el bosque y derrepente todo el paisaje cambio, una basta llanura de hierba alta se extendia a vuestros pies y en el horizonte no se veía otra cosa que esa misma hierba, os recordaba a vuestro hogar el distrito 11 y sus campos de cultivos, os sentias mas o menos como en casa, decidisteis buscar un sitio para descansar, encontrasteis una zona adecuada y os establecisteis hay, comenzasteis a escuchar un pitido y entonces un paracaidas aparecio, dentro habia comida, decidisteis comer un poco y guardar un poco

Javik

Los otros cuatro te miraron asta que Rhaegar te contesto

-Tranquilo guapito de cara, no te vamos a mmatar de momento pero no es de tu incunvencia el por que

-Bueno tendras hambre, no-dijo la chica de voz dulce, que reconociste como Sonea del distrito 12 de uno o dos años menos que tu

-Toma-dijo Robb mientras le tirba un paquete de cecina-por cierto este es Regin del distrito 3

-Encantado dijo este ultimo mientras se colocaba sus gafas sobre su pelo negro y corto


Tu plan funciono al principio y lograste agarrarte al muto y distrairle mientas el hombre de color hacia caer su martillo en la cabeza del leon dejandole aturdido y de esto se aprovecho el otro chico que lanzo las hachas con fuerza hacia el leon, errando con una por escasos milimetros y la otra se clavo n el pecho del leon hiriendole de muerte pero este con un ultimo aliento se desizo de ti y te desgarro con una garra el muslo izquierdo pero al final estaba murio. El chico de las hachas te vendo el muslo y te sofoco un poco el dolor

Todos

Habia oscurecido y dono el himno del capitolio en cuanto el simbolo de Panem brillo en en cielo e inmediatamente comenzaron a aparecer las fotos de los 18 distritos muertos: una chica del 1 y los dos chicos del 2, los 4 del 5 y del 6, las dos chicas y un chico del 7, las dos chicas del 9 y un chico y na chica del 10

Pd: Haber si adivinais como es la arena ya os he dejado varias pistas, ya se han descubierto tres zonas, un bosque de pinos como el del 7 y una  playa como la del 4 y un prado extenso omo los del 11
EDITADO EL 18-06-2012 / 16:15 (EDITADO 1 VEZ)
Odamarasengan5053Hace 11 años38
Dante:
Tras is al bosque, pude observar que el lugar era idéntico al del distrito 11, una grandísima pradera donde era imposible que nos localizasen. Mas tarde, el capitolio nos mostró una foto de todos los chicos muertos en la arena, y grata fue mi sorpresa cuando observé que Javik, al igual que yo, había sobrevivido. Inmediatamente pensé en ir el día siguiente a buscarle, ya que con el, aparte de estar mas protegido podíamos charlar un rato. Un paracaídas cayó y nos proporcionó algo de comida, así que decidimos comer lo mas mínimo y guardar provisiones para próximos días. Cogí mi saco de dormir y sin mas dilación me caí en un profundo sueño...
Fanjoseka5816Hace 11 años39
[u]Javik Syn Nikto[/u]

[i]Estaba confuso. No ya por la pesadilla ni por el terror estúpido que me había provocado, sino por la situación actual. Como suponía, Rhaegar fue el que me contestó de la forma en la que supuse que lo haría. Engreído, irradiando superioridad por cada poro de la piel. No me importaba que lo hiciera a propósito o no; ya se había ganado que le apuntara en mi lista negra de "Desconfianza". Y sí, me molestó que me llamara guapito de cara. Fruncí el ceño y estuve a punto de decirle algo. Y sí, esta vez sí que fui yo de verdad[/i] — [b][color=darkred]¿Tú te has visto?[/b][/color] — [i]esperaba que no lo tomara como un cumplido, pues le puse todo el veneno en el tono como me fue posible. Entonces habló aquella voz dulce, la chica del grupo. Pude recordarla finalmente; era Sonea, de mi propio distrito. Era probable que Robb y ella misma me conocieran de vista; al fin y al cabo, era la especie de hijo/nieto de Sae la Grasienta. Todos sabían que yo era el único "adoptado", por así decirlo. Entonces se me ocurrió la extravagante idea de que aquella pesadilla estuviera relacionada de alguna forma con mis orígenes. No tenía sentido, claro; no había lógica alguna. De todas formas, los sueños y pesadillas no tienen siempre que tener sentido. Sonea me preguntó si tenía hambre, y yo asentí de forma casi imperceptible con la cabeza. Robb me tiró a mi regazo un paquete de cecina -¿lo habrían sacado de la Cornucopia o alguno de ellos ya habían recibido algún paracaídas de los patrocinadores?-, lo abrí con cautela y me llevé un trozo a la nariz para olisquearlo; puede que le hubieran puesto cianuro. Aunque claro, si daba por afirmativa esa suposición tendría que averiguar como habrían conseguido el veneno, y tampoco tenía mucho sentido. Es decir, me estaban tratando más o menos bien. ¿Estaba secuestrado o algo por el estilo? Comí un poco y alcé la mano cuando Regin habló[/i] — [b][color=darkred]Sí, em, hola. Me llamo Javik[/b][/color] — [i]al poco, apareció el himno nacional y las fotografías de los rostros de los tributos asesinados aparecieron. Conté con los dedos de las manos. La chica del 1, los dos chicos del 2, ambos del 4 5 y 6, dos chicas y un varón del 7, dos chicas del 9, el chico del mismo distrito y una chica del 10. En total, 18 de 48. Me mordí el labio inferior. Necesitaba recordarme que seguía vivo, y no sabía el por qué.

Coloqué mi saco de dormir lo más lejos posible de todos ellos -más de Rhaegar- y me fui lo más pronto posible a él, fingiendo que dormía. Necesitaba pensar con tranquilidad. Necesitaba un arma. No ese cuchillo pobre de sierra que no servía realmente mucho contra un cangrejo gigante, ya sabes. Un tomahawk si que sería increíble. Pero no tenía a los patrocinadores de mi parte, aunque puede que decidieran enviarme algo, para ayudar a los favoritos del grupo y en general de aquella edición de los Juegos: Robb y Rhaegar; aunque preferí optar por la opción de no hacerme muchas ilusiones. Y estaba pensando, claro, en fugarme. Bueno, lo más parecido a una fuga. Seguro que alguien haría la guardia... podría ser yo, aunque no resultaría del todo convincente después de irme a dormir tan pronto. Y me di cuenta entonces. No quería irme, y no estaba del todo seguro porque. Bueno, sí. No estaba bien solo. Algo en mi cabeza hacía un clic y todo se venía abajo. Así que decidí por lo más sencillo: ya elegiría más tarde. Me levanté, dejé el paquete de tiras de cecina en el suelo -si decidía irme no era un ladrón- y guardé el saco de dormir en mi mochila. Elegí el árbol más alto sin mediar palabra y empecé a escalar hasta la rama más gruesa. Allí, puse de nuevo el saco y me metí en él. Así, si me decidía por irme en medio de la noche podría ir entre rama y rama y punto. Tenía en una mano el cuchillo de sierra. ¿Vendría alguien? Oh. OH. ¡OH! ¿Cómo se me había ocurrido matarles? ¿Podría hacerlo cuando estuvieran dormidos y luego irme tan contento? Si lo hiciera, no me parecía justo. Me habían tratado bien -menos Rhaegar; lista negra foreváh and eváh-  y por lo menos, se merecían eso. Que si les traicionara, fuera al irme, y no al intentar atacarles. Pero sí, la idea era muy tentadora.[/i]
EDITADO EL 18-06-2012 / 16:56 (EDITADO 1 VEZ)
Joancarl5292Hace 11 años40
Dia 2

Javik

Ya habia amanecido, las luces del sol te despiertan y miras hacia bajo con cuidado y ves que los otros cuatro estan alrededor de un paracaidas bastante grande, decides ir a ver que contenia y te acercas al grupo

-Habras dormido bien imagino, llevas una hora dormido desde que nosostros nos levantamos-dice Robb con gesto amistoso

-No le chinches, pobrecito-dijo Sonea-hemos esperado a que despertases para abrirlo

-Ya puedo abrirlo no-pregunto Rhaegar con ese tono de voz seductor que tenia siempre

-Si, haber que es-responde Sonea

Rhaegar lo abrio con rapidez y alli había un arco negro precioso que parecia vibrar por si solo

-Creo que esto es para ti-dijo pasandole el arco a Robb, debia de ser muy caro

-Por fin, han tardado lo suyo, aunque aun falta algo-dijo Robb, mientras ponias cara de sorpreas

Cuando te ibas a alejar Rhaegar volvio a hablar-Guapito tambien hay algo para ti, dijo tirandole un puequeño objeto que coguiste al vuelo, una daga, algo es algo

-Bueno creo que debemos irnos de aqui, vayamos a otra zona de la Arena-digo Regin-por cierto Javik as descubierto como son las zonas de la Arena-pregunto el mientras avanzaban a otra zona

Al cabo de un rato escuchasteis un sonido inquitante delante de vosotros y corristeis en aquella direccion y cuando ya habias corrido varios minutos el paisaje cambio convirtiendose en un valle con una gran montaña en en centro e inmediatamente un cañonazo sono y un aerodeslizador aparecio cargando un cuerpo

Dante

Os levantasteis nada ams salir el sol y salisteis en busqueda de Javik mientras la pradera seguia sin mostrar signos de acabar, cuando llevavais unas horas caminando el paisaje cambio a un bosque con altos arboles a un lado de la zona y al otro lado montañas con puqueñas minas de lo que parecia carbon, escuchasteis un quejido de dolor y encontrasteis un chico herido con todo el mono manchado de sangre (podeis curarlo o matarlo, te dejo controlar a Kal)
Fanjoseka5816Hace 11 años41
[u]Javik Syn Nikto[/u]

[i]Me desperté con los rayos del sol, ya había amanecido. Bueno, despertarse es decir poco. Otra vez la misma pesadilla; sin cambiar nada. Casi me caigo. Literalmente. No sé como -se ve que me muevo mucho durmiendo y todavía con con pesadillas- había conseguido salirme del saco de dormir dándole unas pocas de patadas, y me desperté así: cuasi rodando por la gruesa rama. Me colgué rápidamente del brazo de ella, casi dependiendo de la fuerza de mi único brazo. Que gracias al Creador, no era poca. Me subí casi de un salto, soltando una maldición. Recogí el saco, lo metí torpemente en la mochila y me di cuenta de que abajo ocurría algo. Esperaba que no se hubieran dado cuenta de mi numerito. Al parecer había un paracaídas gigante, y todos estaban mirándolo, sin abrir. ¿Acababa de llegar? Con cuidado bajé del árbol y a unos dos metros del suelo, me decidí por dar un salto y hacer el viaje más corto. Sin problemas. Me acerqué al grupo y con algo de sorpresa comprobé que me habían tenido en cuenta. Al parecer me había despertado una hora más tarde que ellos, me dijo Robb. Eso me hizo que me revolviera un poco por dentro, hubiera deseado que me despertaran. La pesadilla constante no era agradable, pero no dije nada al respecto. Sonea me descubrió que me habían esperado para abrirlo. Por eso lo de que me habían tenido en cuenta. Seguro que en aquella hora se habrían mordido las uñas como nunca. Rhaegar como siempre tenía que hablar... con ese tono asqueroso. Él mismo lo abrió y todos nos quedamos sorprendidos al ver un arco negro. Me fijé en que parecía vibrar levemente, como si tuviera vida propia. Se lo dieron a Robb, obviamente. A mi nunca me darían algo tan caro, aunque probablemente los dos seríamos tan buenos como el otro manejándolo. Pero sinceramente, no me importó, ya sabía que la suerte no estaba de mi lado. Me alejé unos cuantos de pasos sin mediar ninguna palabra cuando Rhaegar provocó que girara mi cuerpo en el momento justo para atrapar algo en el aire. Miré el objeto plateado y comprobé que era una daga. Algo es algo. Aunque seguramente lo hicieron para que intentara proteger de alguna forma a Rhaegar, porque Robb acababa de recibir un arco increíble. Sí, perfecto. Ojalá me hubiera tocado "proteger" al jorobado de NotreDamm, aunque puede que la audiencia quisiera que hiciera lo mismo con Sonea y Regis. Había unos pocos de motivos, y no ganaba nada intentando averiguarlos.

Entonces Regin me preguntó si había descubierto como eran las zonas de la Arena. Sí, me había dado cuenta. La Cornucopia siempre está presente, pero parece que había zonas diferentes. El bosque de pinos del siete, una playa seguramente como la del cuatro... no tenía mucho con lo que trabajar con eso, así que le dirigí una mirada de "Estoy en ello". Al poco, oímos un ruido algo desconcertante y fuimos hacia él. Descubrimos un valle gigantesco y vimos un aerodeslizador llevándose un cuerpo[/i] — [b][color=darkred]Mala señal. A ver, pensemos. Rhaegar, no te esfuerces, sabemos que eso te cuesta bastante[/b][/color] — [i]dije, quitándome la mochila y poniéndome en cuclillas. Saqué la daga afilada y tracé un círculo y lo dividí en cuatro zonas, y en el centro un pequeño circulo que simulaba ser la Cornucopia[/i] — [b][color=darkred]La zona de la Cornucopia era una especie de círculo, y más alla, se encuentra el cuerno dorado. A ver, salí a toda prisa... y me encontré con el bosque. Una especie de marea nos empujó hacia la playa, donde apareció el cangrejo. Ahora, un valle. ¿Es por la mañana?[/b][/color] — [i]en la primera área, la de la esquina superior izquierda,  dibuje unos bosques altos y una marea, luego en la segunda, una playa con un cangrejo, luego en la tercera un valle sin nada y en la cuarta, un interrogante[/i] — [b][color=darkred]No tiene por ejemplo ser lo mismo, pero... parece que la hora peligrosa es la mañana, pero es pronto todavía para estar seguros[/b][/color] — [i]dije en un suspiro, y me incorporé[/i] — [b][color=darkred]¿Vamos?[/b][/color] —
Odamarasengan5053Hace 11 años42
Dante:
Nada mas despertar fuimos a buscar a Javik. Necesitábamos su ayuda, sin el no creo que sobreviviésemos mucho. Caminamos durante unas cuantas horas, hasta que llegamos a un lugar con unos cuantos árboles y unas montañas al otro lado, que parecían tener minas. No pensé en entrar a las minas, ya que podía haber mutos, supervivientes y otras cosas *indeseables*. Al ver eso, oímos un quejido de dolor no muy lejos de la zona. Vimos a un chico herido. Podía ser una trampa o podía ser que el chaval necesitaba ayuda. No me fiaba, así que le dije a Kal:
-Kal, subiré a ese árbol y te cubriré con este cuchillo arrojadizo. Si ves que no es una trampa, mátalo. No sabemos cuales pueden ser sus verdaderas intenciones.
3DPrinco518Hace 11 años43
[b]Winry Rockbell[/b]

La jugada salió "bien", y la bestia acabó muerta. Digo "bien", porque la sangre que resbalaba sobre mi pierna era señal de algo grave. Bueno, vale, tampoco tanto, pero me gustaba dramatizar. El chico moreno de piel (por decirlo suavemente) me "curó" la herida.
- Joder- dije en alto- por qué tiene que pasarme esto a mi?- dije llevándome la mano a la sien. Ahora lo lógico y lo correcto, sería preguntar sus nombres a los dos chicos, y luego decirles el mío. Pero no me daba la gana. No, no me apetecía.

Amaneció, y comenzaron a sonar los cañonazos. Ni siquiera me digné a escucharlos. a regañadientes decidí preguntar.
- Cómo os llamáis?- pregunté, y sin apenas dejarles tiempo, seguí hablando- yo soy Winry, Winry Rockbell. Qué haremos ahora?- pregunté llevándom,e ambas manos a las mejillas.
Joancarl5292Hace 11 años44
Winry

El de piel oscura se dirigio a ti y con una sonrisa amigable te dijo

-Si, ya sebemos quien eres, yo soy Jeff del 11 y mi compañero el de las hachas es Gordon del distrito leñasor por eso las maneja con soltura

-Encantado-Dijo Gordon-debes estar muy loca para saltar encima del muto, mirad nos envian algo-dijo señalando un paracaidas

Tenias la esperanza de que fuera lo que tu querias y cuando toco el suelo fuiste corriendo y lo abriste, dentro habia 11 panes del distrito 11 y un paquetito con una nota, la leiste era de Beete tu mentor

[i]Queria Winry de momento te ayudara, confia en estos chicos y sobrevive[/i]

Abriste el paquete y habia una cadena puequeña pero suficiente para tus trampas. Repartisteis los panes dejando dos que sobraban para despues comeros el resto, cuando acabasteis escuchaste dos gritos de dolor, eran tus amigos del distrito provenian del bosque, puedes correr hacia alli o ignorarlos

Dante

Armado con tu remo cubriste a tu hermana mientras esta examinaba al chico, le curasteis como pudisteis y cuando recupero la conciencia os miro asustado pero al final os hablo

-Gracias por curarme, me llamo Jake y pertenezco al 10, me atacaron unos mutos cuando cayo la noche, debemos alejarnos del bosque, debemos meternos en las minas son un lugar seguro alli no nos pasara nada

Javirk

Robb se acerco a tu dibujo y nego con la cabeza-no, no es asi, te dejaremos que lo averigues tu solo-dijo con una sonrisa-sigamos creo que la montaña sera un buen lugar en el que apostarnos

Si, vamos dijo Sonea mientras abanzaba junto a Robb. Se les veia muy unidos, veias que aveces se tocaban uno a otro pero enseguida apartaban la mano. No os quedo mas remedio que seguir avanzando, Rhaegar iba el ultimo cerrando la marcha, el paisaje te recordaba a algo pero no sabias a que, esa gran montaña era peculiar pero no lograbas establecer por que te sonaba, entonces escuchasteis un siseo y un olor de rosas y sangre lleno el ambiente
Fanjoseka5816Hace 11 años45
[u]Javik Syn Nikto[/u]

[i]Sí, sabía que no estaba bien, pero era lo que se me había ocurrido de buenas a primeras. ¿Robb sabía el secreto del estadio? Hm. Puede, o quizá es que sencillamente se había el chulito para agradar a la audiencia. Algo totalmente normal. Asentí ante lo que decía Robb, la montaña también me parecía un buen lugar para refugiarnos. Aunque sinceramente, con ese arco de última tecnología creado en los laboratorios del Capitolio y la habilidad con las lanzas de Rhaegar, pocos problemas tendríamos. O eso creía. Rhaegar. Ya estábamos caminando. Me dí cuenta de que él cerraba la marcha, siendo el último; delante de él estábamos Regin y yo. Le dirigí una rápida mirada, todavía no confiaba en él. Aunque, bueno. Era un detalle que no me hubiera matado y, además, que además de que intuyera de que la daga era para mí, que me la diera sin más. Cuando volví la vista hacia adelante, me di cuenta de que a veces Robb y Sonea a veces se tocaban muy suavemente. Roce de manos, etc. Pero enseguida se apartaban. Genial. Otra historia de amor prohibida, made in District 12. En serio, no podía ser tanta la coincidencia. Pero en fin, puede que hubiera toda una historia detrás de esos roces. No le di demasiada importancia, solo que probablemente, si Robb tuviera que elegir entre salvar a uno de nuestro grupo -incluyéndome a mí mismo- y estuviera Soena, seguramente la elegiría a ella, fuese por el motivo que fuese. Y entonces me di cuenta de que en toda la mañana no había pensado en mi idea de fuga. Sí, menos mal, porque en aquel momento comprendí que no podía sobrevivir solo.

Y luego estaba esa montaña, este... valle, o como queráis llamarlo. Me resultaba conocido, y no sabía por qué. No conseguía identificarlo. Decidí por decirlo, por si otro tenía la misma sensación[/i] — [b][color=darkred]¿No os resulta conocida esa gran montaña de ahí?[/b][/color] — [i]pregunté en voz alta, cuando llegó a mis oídos un siseo que me hizo sacar enseguida la daga de su escondite y empuñarla con fuerza. Intenté localizar la fuente de aquel sonido, pero entonces apareció ese olor. No es que me resultara ya conocido, sino...[/i] — [b][color=darkred]... familiar[/b][/color] — [i]murmuré, habiéndome parado -hecho que provocó que casi me chocara con Rhaegar-. No tenía sentido. Pero no podía permitirme ninguna duda en los Juegos del Hambre, no en un lugar tan expuesto. Pero esos segundos de confusión y repulsión al olor de rosas y sangre podrían ser vitales, y los había perdido.[/i]
EDITADO EL 19-06-2012 / 01:52 (EDITADO 1 VEZ)
Joancarl5292Hace 11 años46
Javik

El siseo desaparecio al pasar unos pocos segundos y ese nauseabundo olor fue desapareciendo poco a poco. Tras varios minutos en silencio absoluto, Rhaegar hablo de tras de ti

-Creo que es similar a la gran montaña central del distrito 2 y cro que debemos llegar allí cuanto antes-dijo mientras aceleraba el ritmo y se ponia a la altura de Robb y todos comenzasteis a correr, al principio para llegar antes pero tras unos metros recorridos un sonido extraño sono detras niestro y os hizo correr mas, nadie queria comprobar que era. Tras una media hora llegasteis a la ladera de la montaña y alli os encontrasteis a varios tributos, unos 5, todos profesionales

-Hombre mira a quien tenemos aqui a Rhaegar como que no te uniste a nosotros-dijo uno de ellos

-Por que no me interesa-dijo con un tono dedpreciativo

-A claro prefieres ir con despojos como ese-dijo señalandote

-Cuidado con lo que dices-dijo Rhaegar

-si no q ....-no pudo acabar la frase por que una lanza cruzo su garganta y un cañonazo sono y entonces el resto de tributos se lanzaron hacia osotros, dos hacia ti
Fanjoseka5816Hace 11 años47
[u]Javik Syn Nikto[/u]

[i]El siseo desapareció afortunadamente, y junto con aquel olor tan desagradable... aunque para mi no lo era tanto, la verdad. Por la cara de mis compañeros sabía que a ellos les resultaba repugnante. Ay. Justo cuando empezaba a mover mis labios para articular una frase al respecto, Rhaegar me interrumpió, aunque seguramente no lo hiciera a propósito -es decir, estaba detrás de mí, ¿cómo iba a hacerlo?-, y dijo que esa montaña era parecida a la central del Distrito 2. Aparte, claro, de que debíamos ir allí. Sí, genio, ahí es donde nos dirigíamos. Empezamos a correr todos, y él se puso al nivel de Robb. Vale, montaña central del Distrito 2. O al menos parecida. Ahora la pregunta era: ¿por qué me resultaba familiar? No me encajaba. Nunca había estado en el Distrito 2, solo en el 12. Ya empezaba a tener dudas de todo. A los pocos metros de la carrera hacia la montaña, apareció un extraño y siniestro sonido justo detrás de mí y, bueno, del grupo en general. Saqué el cuchillo de sierra con la mano libre rápidamente. Ninguno de nosotros tuvimos la decencia y la educación de ofrecer un té. Además, no teníamos. Pero si hubiéramos tenido, tenía bastante dudas al respecto de si alguien se dignaría para algo así, por supuesto. Todos en perfecto estado -salvo seguramente la adrenalina, cosa que nos estaba dando una ayuda extra-, en una media hora llegamos a la ladera de la montaña. Y nos sorprendieron cinco tributos. Profesionales, seguramente[/i] — [b][color=darkred]Perfecto, cinco estúpidos[/b][/color] — [i]dije, soltando un suspiro. Entonces, con el comentario de aquel imbécil me di cuenta del detalle tan obvio que había pasado por alto. Me mordí la lengua por ello. Rhaegar era un profesional; Distrito 4. ¿Por qué no estaba con la manda insensible de los profesionales? ¿Por qué estaba en aquel grupo? Sí, bueno, ser profesional no te quita el hecho de tener que ser el prototipo de profesional. Ya sabéis, fiel Capitolio, perros guardianes del presidente Snow y mil cosas más. Cosas que me daban arcadas.

Rhaegar, como no, estaba por encima de él, y lo demostró con aquel tono que impuso en su voz. Entonces el otro me llamó despojo -sí, como lo oís-  señalándome con un dedo. Casi me lancé a cortarle el dedo o la yugular, cuando comprendí que Rhaegar me... ¿estaba defendiendo? Vale, sí, un día de locos. Hahah. La idea me gustó. El gran, poderoso, y atlético Rhaegar, deseo actual de todo Panem, saliendo en defensa de un chico del Distrito 12. Hahah. Lo siguiente si que me sorprendió. Una cosa es que me defendiera, y otra que pareciera realmente enfadado. Porque sí, creo que todo el mundo estará de acuerdo conmigo en que atravesar con una lanza a alguien no es estar completamente relajado. Cosas que pasan, claro. Pero enseguida me puse en guardia, porque estaba esperando aquel momento desde que vi aquella manada de profesionales. Dos se lanzaron a por mí. Bueno, eran cinco. Rhaegar acabó con uno fugazmente, y había cuatro. Ergo, la mitad había ido a por mí. Sí, que suerte tenía... aunque bueno, éramos superiores en número. Sí, cinco. Cinco contra cuatro. ¿Alguien tendría que venir a ayudarme tarde o temprano, no? De todas formas, aquel era mi momento. Mi momento para demostrar a la audiencia de lo que era capaz Javik Syn Nikto -Hijo de Nadie- y de paso, ganar patrocinadores. Lancé la daga afilada a la garganta de un tributo -el que veía que sería más fácil matar- con toda mi fuerza. No había mostrado nunca la habilidad de lanzar cuchillos y, aunque no era mi fuerte, lanzar daga afilada + poca distancia + puntería = muerte casi segura. Lanzar el cuchillo de sierra no habría servido de demasiado. ¿Era mejor luchando cuerpo a cuerpo con un arma afilada? Sí, pero de aquella forma podía haberme quitado de en medio uno inmediatamente. Obviamente, me quedaría el otro. Intenté esquivar el ataque inicial, pues lo estaba esperando. Luego, me lanzaría a por él  cuchillo en mano para hacerle una herida en el costado. Ir directamente a por el cuello con un arma tan pequeña como lo era aquel cuchillo de sierra era prácticamente un suicidio, así que mi estrategia sería en ir poco a poco hasta desgastarle, ver un fallo seguro en su defensa y acabar con él de forma definitiva. Además, podría recoger del cadáver del tributo muerto mi daga, si es que hubiera acertado.[/i]
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