Las 7 dimensiones o planos existenciales

En el pasado me consideré ateo, hasta que me dí cuenta de cosas como las premoniciones o las experiencias cercanas a la muerte, de viajes astrales a otras dimensiones, etc.

Si bien no creo en dioses propiamente dichos, creo en energías espirituales, como el aura, en los chakras, el karma, seres que están fuera de nuestro entendimiento, como son los que habitan las otras dimensiones o planos existenciales, la vida luego de la muerte (al menos en otros planos de existencia) y el alma o espíritu.

No creo en dioses porque creo que no son necesarios, estos no explican la naturaleza humana y no son relevantes en nuestra existencia. 

El no-teísmo, a diferencia del ateísmo, no niega la existencia del alma, espíritus, chakras, etc.

El no-teísmo, a diferencia del agnosticismo, no duda en la existencia de dioses, pero comparte un punto en común, de existir, no son relevantes a la humanidad, además, los agnósticos no creen en la espiritualidad, karmas, chakras, premoniciones, etc.

El no-teísmo, a diferencia del teísmo, no cree en dioses.

Además, el no-teísmo NO ES UNA RELIGIÓN, es una forma de pensar y reflexionar sobre la vida y su significado.


Dimensión Física:


La dimensión física, en la cual nos encontramos durante la mayor parte nuestras vidas, excepto al morir y al soñar.

Esta es la dimensión de las formas, las leyes físicas, como la gravedad, de las limitaciones, de los deseos y experiencias, en resumen, es una dimensión donde ves la vida como algo sin importancia, al importarte otras cosas.


Dimensión Etérica:


Al nivel etérico, y para los que poseen desarrollada la clarividencia de esta clase, pueden percibir una gama cromática mucho mayor que la que normalmente se registra en los tres subplanos inferiores.

Desde esa perspectiva, los gases son visibles, así como los éteres, gérmenes, infec-ciones, bacterias, virus, etcétera.

Cada zona GEOGRÁFICA específica posee su propia naturaleza y atmósfera etérica, constituida por los diversos éteres y las criaturas que los habitan: ESPÍRITUS DE LA NATURALEZA y DEVAS.

Estas atmósferas peculiares, positivas o negativas según los casos, tienen una repercusión específica sobre los cuerpos etéricos y la fisiología a ese nivel de las personas que residen o atraviesan esa zona.

Existen Mareas De Materia Etérica, así como existen en el agua del mar, y sus momentos de cambio coinciden con el mediodía y la medianoche.

Igualmente existe una compleja RED de corrientes MAGNÉTICAS que circulan, con diversos trazados, de uno a otro polo, y que poseen un enorme poder de arrastre e impulsión, susceptible de ser utilizado cuando se poseen los conocimientos y medios adecuados, como es el caso de los OVNIS, que utilizan estas corrientes para su desplazamientos a increíble velocidad.

También la antigua y milenaria ciencia de la acupuntura, que por fin ha sido aceptada oficialmente por la medicina, encontramos que trabajan también a nivel etérico, por donde las energías fluyen por miles de meridianos etéricos dentro del cuerpo humano, invisibles al ojo, pero realmente precisos en su organización.


Dimensión Astral:


Es un mundo “patas para arriba”, similar al de Alicia en el País de las Maravillas.

Todo parece ser objetivo (real), pero cambia constantemente y es muy fluido. Cualquier cosa, y todas las cosas, puedes encontrarlas ahí, desde burdos niveles llenos de energía sexual, hasta hermosos y serenos lugares llenos de armonía espiritual.

El tiempo está distorsionado y expandido. Una hora en el Astral puede ser solo unos minutos aquí en lo físico.

Comparada con el mundo físico, la dimensión astral posee una vibración mucho mayor.

Es como jugar un videojuego a 20 veces su velocidad normal, sin embargo, esto no es aparente cuando te encuentras en ella.


Dimensión Mental:


Esta es una dimensión espectacular. Ríos iridiscentes de sonido con orillas de arco iris de luz pulsante.

Los pensamientos se presentan como patrones caleidoscópicos de luz y sonido. Caminas sobre campos de ideas bajo un cielo cristalino y brillante de inspiración. Si entras a este mundo no trates de racionalizarlo o de entenderlo, ya que está más allá de la compresión humana.

Solo acéptalo, déjate llevar y disfrútalo.

Esta dimensión es lo que yo creo que los vikingos llamaban “El Puente del Arco Iris” que lleva a “Asgard”.

Realmente parece y se siente como si caminases a través de un arco iris hacia dentro de un maravilloso mundo, en donde los dioses seguramente habitan.

El estar aquí es una sorpresa maravillosa. Deja que el niño que hay en ti juegue libremente en esta inmaculada tierra maravillosa. Todo se siente real y sólido.

El tiempo en mucho más distorsionado que en el astral, y la realidad es caleidoscópica.


Dimensión Búdica:


Este es un tibio y abstracto mundo, lleno de una paz manifiesta y de un amor infinito.

Esta es una dimensión de puro Blanco. No existe aquí otra percepción de visión o sonido más que el todo-penetrante y brillante Blanco.

En esta dimensión rápidamente dejas de tener pensamientos conscientes y de individualidad.

Ya no puedes pensar más una vez que has entrado aquí, y tampoco experimentas deseos conscientes. Solo existe un irresistible llamado que te lleva hacia un calmado silencio.

Es como si estuvieses inmerso en una tibia, pura y Blanca nube de algodón. En esta dimensión cesas de ser un individuo y te conviertes EN PARTE DEL UNO. Además cesas de ser hombre o mujer. En cierta manera es como si regresases al vientre de la Madre.

Te encuentras rodeado, absorbido y asimilado por un infinito amor tibio acogedor, comprensión, perdón y compensación EN UNIDAD.

El tiempo aquí deja de tener cualquier sentido. Si entras a este mundo no desearás jamás, nunca irte de él, y no puedes dejarlo, hasta que tu cuerpo físico te llame y te succione de vuelta.

Este es el lugar de curación y descanso del alma.


Dimensión Átmica:


Esta dimensión parece ser un mundo espiritual. Aquí es donde los espíritus aguardan a aquellos que han amado durante su estancia en la tierra.
Este es el feliz lugar de las reuniones. Es el lugar donde la reunión de las almas se encuentran.

La luz de este lugar es del más puro y brillante resplandor plata, más brillante que la luz emitida por un arco de soldar. Es tan brillante que parece imposible tratar de mirar, pero se puede, una vez que miras, resulta una ser una luz inmensamente suave, acariciante y calmante. Es la luz del amor divino.

La gente aquí aparece tal cual era en el mundo físico, pero de la manera más magnificente. Ellos emiten luz de una manera estática, irradian con el amor, alegría y regocijo más intensamente imaginable.

La atmósfera es eléctrica y vital, pero, al mismo tiempo, profundamente espiritual.

La comunicación aquí es realizada a través de imágenes telepáticas de alto nivel, similar a la clarividencia de uno-a-uno, solo que mucho más vívida y real.

El tiempo aquí se manifiesta totalmente imperceptible. La realidad es más real y sólida que en la realidad normal. Comparado con esta dimensión, el mundo físico es como un sueño vago y cansado, lleno de gente media muerta.


Dimensión Monádica:


Última dimensión, la más alta, donde se te revelará el secreto de la existencia, los por qué, todas las respuestas, te encontrarás con una paz y un amor interior indescriptibles.

Según algunos, existe otra dimensión más allá, la divina, donde dioses y otras deidades viven, según yo, al no existir dioses al no necesitarlos, esta dimensión es sólo una suposición.


Saludos!