El análisis de los lectores

¿Has probado el juego? Pues anímate y comparte tu experiencia con el resto de jugadores realizando tu propio análisis de Eastward. Diles lo que te gusta y lo que no del juego, sus puntos fuertes, si ha cumplido tus expectativas, las sensaciones que te ha transmitido. Tu análisis será publicado en la revista y leído por muchos usuarios, ¡Lúcete!

Jugabilidad:

Gráficos:

Sonido:

Innovación:

A sartenazo limpio

Eastward es una aventura de acción que principalmente entra por los ojos gracias a un apartado artístico precioso y que nos retrotrae a la época en el que las consolas de 16 bits dominaban el mundo. Su estilo pixel art es de los más coloridos y detallados que recuerdo. Su banda sonora peca de repetitiva pese a que esta compuesta por temas muy chulos que comparten una misma base. En un principio no llegó en español, así que me ha sorprendido gratamente la fenomenal adaptación a nuestro idioma introducida a posteriori; Ramón Méndez es sinónimo de calidad y trabajo bien hecho. La trama es la típica en la que una fuerza oscura está destruyendo el mundo y en nuestro viaje por él con la única intención de sobrevivir nos convertiremos en héroes por accidente. La historia se irá desarrollando en las diferentes ciudades que vamos visitando, dividiendo el tiempo que pasemos en ellas en fases. Dentro del propio juego nos encontraremos con una recreativa llamada Earth Born que es un claro homenaje a Dragon Quest y a los diseños de Akira Toriyama y que se puede jugar y completar de cabo a rabo, incluso incluye un nuevo final si se le da una segunda pasada, En un JRPG que se debe finalizar dentro de un límite de tiempo, ahí está el truco. Jugablemente se resiente debido a un ritmo muy irregular repleto de altibajos, llegando su punto de inflexión en el tercer capítulo, momento en el que estuve a punto de abandonar debido a que se olvidan del enfrentamiento con el peligro y te tienen dando vueltas de charla en charla sin progresión ninguna. A partir de ahí la sensación de que nuestras andanzas están siendo estiradas artificialmente será constante y palpable en demasiados tramos. John es el mudo protagonista principal, armado inicialmente sólo con bombas y una sartén encarna a la fuerza bruta y una gran mano para la cocina; Sam es la magia, una pizpireta niña que es la sal del dúo, coprotagonista y un personaje adorable. Juntos se enfrentaran a diversas mazmorras repletas de puzles y enemigos, algunas con un diseño espectacular, coronadas con su jefe final. Estamos ante un simpático título accesible para todo el mundo pero que se ve lastrado por su desigual cadencia, y es que pasa de ser muy disfrutable a un tedio con una facilidad pasmosa. En un videojuego de este estilo resulta duro para el jugador estar más tiempo de charleta que repartiendo estopa entre los monstruos del lugar.

EDITADO EL 01-12-2023 / 21:54 (EDITADO 1 VEZ)

Eastward: El análisis de los lectores