Datos importantes para entender el éxito del K-Pop

Este género musical originario de Corea del Sur se ha venido apoderando de los primeros lugares en las listas de música más importantes del mundo. Hace un par de meses, la banda surcoreana BTS logró la hazaña de ubicarse en el primer lugar de la disputada lista de hits que organiza la revista Billboard. Se trata de la primera vez en la historia que una banda surcoreana alcanza esa posición, confirmando que [b]el monstruoso éxito del K-Pop se ha vuelto un fenómeno mundial.[/b]



Y si queda alguna duda de que el género llegó para quedarse, debes saber que la revista Time incluyó a esta boy band en su lista de las 25 personas más influyentes de Internet a finales de junio.

Sin embargo, el K-Pop se originó mucho antes de la integración de BTS, que dista mucho de ser la única banda del género. Tal vez tu primer encuentro con el K-Pop haya sido gracias al sencillo [i]Gangnam Style[/i], de PSY, que estalló en 2012 y llegó a posicionarse como el video más visto en YouTube al alcanzar el récord de 1,000 millones de visualizaciones (actualmente triplica esos números).



Con un ritmo ultra pegajoso, la mezcla de géneros musicales distintos en una sola canción, coreografías muy elaboradas y diferentes personajes, [b]el K-Pop fue hecho a medida para encantar a los jóvenes[/b]. A continuación, te presentamos cinco datos relevantes para que entiendas mejor el éxito de este fenómeno musical.

[size=27][b]El K-Pop en la década de 1990.[/b][/size]

Los orígenes del K-Pop se remontan al año de 1992 en una osada presentación que realizó una banda llamada [b]Seo Taiji and Boys[/b]. Como Corea del Sur se encontraba en pleno proceso de modernización y la censura empezaba a reducirse, las cadenas de televisión empezaron a introducir en la audiencia nuevos géneros musicales a través de espectáculos de talento (antes, la música típica que escuchaban los surcoreanos en televisión consistía en repetitivas odas de amor y lealtad a la patria).




[size=27][b]La primera banda del K-Pop.[/b][/size]

El [b]11 de abril de 1992[/b], en un espectáculo de talentos la banda Seo Taiji and Boys presentó el sencillo [b][i]Nan Arayo[/i][/b] (Lo sé). Con un ritmo musical donde se mezcló el pop estadounidense moderno y la cultura de Corea del Sur, [b]la letra de esta canción versaba sobre las preocupaciones de los adolescentes y la presión social para alcanzar el éxito[/b]. La banda no sólo terminó perdiendo el concurso, también fue elegida como la peor presentación de esa noche.

Pero el público no estuvo de acuerdo. En poco tiempo, la canción empezó a sonar en las principales estaciones de radio, donde mantuvo un impresionante récord de 17 semanas al aire. Cuatro años después, cuando todavía gozaban de éxito, la banda decidió retirarse de la escena musical.


[size=27][b]Una política gubernamental.[/b][/size]

Dado el gigantesco movimiento que provocaba el género musical en ascenso, un empresario organizó un grupo llamado H.O.T., instruyendo a cinco cantantes y bailarines para que se transformaran en aquello que él creía los jóvenes querían ver en un grupo de pop. Esta fórmula funcionó tan bien que [b]el estímulo al K-Pop prácticamente se volvió una política gubernamental[/b], con una parte del presupuesto dedicada a montar estos grupos.




[size=27][b]Fabricando ídolos.[/b][/size]

Hechos a medida a través de competencias sumamente disputadas, [b]los grupos suelen estar conformados por cinco integrantes, cada uno con roles bien definidos[/b] (el bromista, el novato, el cantante, el bailarín, etcétera), y nombres cortos, generalmente siglas, que resultan perfectamente comprensibles en otros idiomas – Blackpink, 2NE1, BTS, Girls’ Generation. Desde que se produjo el [i]boom[/i] del éxito, ha existido presión para que la industria mejore los contratos con los ídolos del K-Pop, que muchas veces son sometidos a jornadas laborales abusivas.




[size=27][b]Un negocio de mucho dinero.[/b][/size]

Algunas estimaciones apuntan a que [b]la industria del K-Pop mueve alrededor de US$ 5,000 millones[/b]. En las principales ciudades estadounidenses, como Houston, Chicago y Atlanta, las bandas de K-Pop llenan fácilmente recintos con capacidad de hasta 2,500 personas. En la ciudad de Los Angeles, desde hace una década el Festival de la Música Coreana atrae a más de 17,000 personas al Hollywood Bowl – desde hace algunos años se ha visto una mayor presencia de público coreano, llegando a representar hasta el 30% de la asistencia.




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